El cáncer de colon es el tumor maligno de mayor incidencia en España, con más de 40.000 nuevos casos en el año 2021, según datos extraídos del Observatorio de la Asociación Española Contra el Cáncer. Aunque preocupa más que, en el mismo 2021, fallecieron más de 15.000 personas a causa de este. De esta forma, se puede decir que en España la tasa media de supervivencia a 5 años se sitúa en un 65%. Pero esta cifra se puede y se debe mejorar.

Una de las apuestas importantes para disminuir estas cifras es apostar por los programas de cribado a través de los test de sangre oculta en heces. La evidencia científica ha demostrado que la detección precoz, a través de programas de cribado, disminuye la mortalidad a corto plazo entre un 30 y un 35%. Además, un estudio realizado con los datos del Programa Poblacional del País Vaco ha demostrado una reducción de la mortalidad a 5 años del 23,4% en las personas participantes en el programa.

El problema es que actualmente en España los programas de detección precoz del cáncer de colon está implantado desigualmente en las diferentes Comunidades Autónomas. Solo dos de ellas, en concreto, País Vasco y Navarra, superan el estándar deseable de participación del 65% en los programas de cribado. Además, la realidad es que la participación de la población en los programas de cribado es muy variable, pasando a cifras de un 22% en Ceuta al 60% en La Rioja.

La importancia de los programas de cribado

“Todo el mundo sabe que las mujeres se hacen el cribado de cáncer de mama, pero los hombres estamos menos concienciados, por ejemplo, con el cáncer de colon o el cáncer de próstata”, explicaba José López. Precisamente, en su caso, su cáncer de colon fue detectado en una campaña de cribado en la que reconoce que participó “casi por casualidad”, acompañando a su mujer. “A mí el cribado me ha salvado”, afirma, ya que de otra forma su cáncer quizás no se hubiera detectado a tiempo para ser intervenido.

Cabe recordar que la población con más riesgo de padecer cáncer de colon son hombres y mujeres entre 50 y 69 años. De hecho, precisamente en la franja de edad entre 50 y 69, la incidencia en 2021 fue de 15.988 casos y fallecieron 3.667 personas. Es por ello por lo que en diferentes comunidades autónomas sí que existen programas de cribado instaurados que remiten una carta a esta población diana para instarles a hacerse una prueba de test de sangre oculta en heces.

Este fue el caso de Joaquín Ortega, que tras la recibir la carta, acudió a una farmacia de su localidad para dejar su muestra. “Tras unos días me llamaron y me dijeron que habían encontrado sangre en heces, cosa que me sorprendió, porque yo me encontraba perfectamente, no tenía ningún problema”.  Joaquín recibió un diagnóstico de cáncer de colon de grado 3, es decir, sin metástasis, lo que supuso poder realizar una intervención quirúrgica con buenos resultados.

“Yo acudí a la prueba, pero mucha gente pasó de la prueba porque creía que estaba bien, pero a raíz de lo que me pasó a mí, ya sí quisieron pasar la prueba”.  Tras su experiencia tiene claro que este tipo de cribados son muy importantes, “porque muchas veces cuando tú te das cuenta, ya es tarde”.

Una prueba rápida, indolora y económica

El sistema de cribado salva vidas, pero también es una forma de mejorar nuestro sistema sanitario, ahorrando recursos. Para poner cifras, hay que tener en cuenta que el coste del test de sangre oculta en Heces (TSOH) es de 2€. Sin embargo, el de una colonoscopia llega a ser de aproximadamente 200€, si no precisa de intervención.  Así, en un informe publicado por la Asociación Española Contra el Cáncer en 2020 se recoge que la estimación del coste de un cáncer colorrectal metastásico es tres veces más que un cáncer detectado en estadio local.

Ante esta situación es necesario concienciar a la población de la importancia de participar en los programas de cribado, ya que, como comenta Joaquín, mucha gente no acude por no detectar síntomas, cuando en realidad el objetivo del cribado es precisamente ese, detectar el cáncer antes de que dé la cara por estar en un estado más avanzado.

Sin embargo, también es imprescindible que toda la población española tenga el mismo acceso a estos programas de cribado. Actualmente solo son 10 Comunidades Autónomas las que han alcanzado una cobertura de la población diana (50 a 69 años) cercana al 100%: Andalucía, País Vasco, Navarra, Comunidad Valenciana, La Rioja, Castilla y León, Cataluña, Galicia, Castilla La Mancha y Asturias.