9 de cada 10 personas sobrevivirían al cáncer de colon, el de mayor incidencia en España, si se detectara de forma precoz. Por ello, es imprescindible concienciar a la población diana, hombres y mujeres entre 50 y 69 años de edad, sobre la importancia de participar en los programas de cribado del cáncer colorrectal y sobre los beneficios de la detección precoz del cáncer de colon a través del test de sangre oculta en heces (TSOH). 

A través de esta prueba, higiénica, rápida e indolora y que el paciente puede realizar por sí mismo en su domicilio, se pueden detectar cantidades microscópicas de sangre en una muestra de heces. Y en caso de ser positiva, podría indicar la presencia de una lesión, que puede ser maligna o no. Solo en este caso es necesario realizar una colonoscopia, para detectar o descartar un posible tumor o pólipo y analizar la lesión que pueda existir. El test se hace cada 2 años si el resultado es negativo. 

El 82,4% de la población objetivo, entre los 50 y 69 años de edad, conoce el programa de cribado, un 87% el TSOH y casi el 98% sabe lo que es el cáncer de colon, según el Estudio sobre los programas de cribado de cáncer colorrectal del Observatorio de la Asociación. Sin embargo, solo un tercio cree que tiene un riesgo personal alto o muy alto de un posible diagnóstico de cáncer colorrectal a lo largo de su vida, frente a un 69,5% que lo considera bajo o muy bajo, cuando es el de mayor incidencia en España. 

Además, existen ciertas barreras actitudinales como, por ejemplo, el miedo o la dejadez, que llevan a la ciudadanía a no hacerse la prueba, según datos del Observatorio del Cáncer. 

Cuando hablamos de detección precoz del cáncer de colon, también pueden aparecer las denominadas barreras actitudinales, analizadas en el “Estudio sobre los programas de cribado de cáncer colorrectal” realizado por el Observatorio del Cáncer, y que son, por ejemplo:  

• El no haber recibido la invitación oficial para participar en el programa de cribado (39,9%). 
• La falta de síntomas o el encontrarse bien de salud (39,6%). 
• El olvido o la dejadez (28,6%). 
• Deseo de mantenerse alejado de los centros médicos en el contexto de pandemia (24,9%). 
• La saturación percibida en la sanidad pública (22,1%). 

Además, también pueden aparecer barreras logísticas relacionadas con el tiempo, la disponibilidad o la complicación del procedimiento. Sin embargo, aparecen con carácter secundario y tras alguna de estas justificaciones subyace una actitud de rechazo, de resistencia o de negación previa. 

Cosas que no sabes sobre el cribado del cáncer de colon 

Todas las personas de riesgo medio tienen derecho a poder participar en los programas de cribado del cáncer colorrectal. Este derecho solo estará garantizado cuando los programas de cribado poblacional de este cáncer alcancen una cobertura (entendida como invitación a participar) cercana al 100% de la población diana. 

El programa de cribado del cáncer colorrectal funciona de tal manera que el paciente es contactado desde el propio servicio de salud autonómico y reciben la invitación a participar por parte de la Consejería de Salud. 

Además, es necesario seguir profundizando en la educación sobre los principales factores de riesgo asociados al cáncer colorrectal que son:  

• La edad. Es el principal factor de riesgo no modificable de padecer cáncer colorrectal, ya que el riesgo de padecer la enfermedad y de la aparición de pólipos en el colon y recto aumenta con los años. La mayoría de los pacientes con cáncer de colon tienen más de 50 años, aunque también puede aparecer en personas más jóvenes. 
• Sobrepeso y obesidad. De forma general, ambas situaciones se asocian con un mayor riesgo de sufrir cáncer colorrectal. Es posible reducir el riesgo de cáncer en general, hasta en un 18%, a través de una alimentación sana, manteniendo un peso saludable y realizando actividad física a diario. 
• El sedentarismo. Una vida sedentaria favorece el riesgo de aparición de la enfermedad. Hacer ejercicio y mantenerse activo es importante.  
• Una mala alimentación consistente en dietas ricas en grasas animales (carnes rojas) y pobres en fibra (fruta y verdura)  
• Consumo de tabaco y alcohol. El tabaco aumenta el riesgo de padecer pólipos, que suelen ser los precursores del cáncer colorrectal, y está relacionado con hasta 16 tipos de cáncer. Por su parte, el consumo de alcohol favorece el crecimiento de las células de la mucosa del colon, dando lugar a la aparición de pólipos. 

Importancia del cribado en la detección temprana del cáncer colorrectal 

A pesar de que el nivel de conocimiento de la población sobre el programa de cribado y el TSOH es muy elevado es necesario mantener estos niveles informativos y fomentar en el colectivo que decide no hacerse la prueba la necesidad de participar, a pesar de no presentar síntomas, de gozar de una buena percepción de salud y/o de considerar que aún son jóvenes para realizarse el test. 

Hay que recordar que 9 de cada 10 personas sobrevivirían al cáncer de colon si se detectara precozmente, lo que ayudaría a alcanzar el objetivo de la Asociación de superar el 70% de supervivencia en cáncer en 2030. 

¡No lo olvides, la detección precoz te puede salvar la vida!